6 de junio de 2006

Mi negro no es de color

El escritor, que esta noche está algo trágico (puede ser efecto de la aerofagia o de los espíritus burlones que pueblan las tinieblas) piensa que él también debería acostarse como sus convecinos, para vivir mañana una nueva jornada de esa fábula jocoseria a la que llamamos vida, pertrechado con sus ropajes de civilización y ducha matutina, de café con leche y ojos abiertos. Pero en lugar de eso continúa escribiendo, arrojado por la urgencia del que sabe que quizá no tenga ocasión o deseo de hacerlo de nuevo próximamente. Un murciélago que vuela por la calle emite sus chillidos. Los murciélagos son esos habitantes escondidos de todas las ciudades, de todos los pueblos, de todas las ruinas, más cotidianos aún que las sucias palomas, más ignorados que éstas por sus costumbres noctívagas y poco humanas (algunos incluso dicen que no hacen daño a nadie).

El escritor alza en un nuevo trago el recipiente de aluminio y se da cuenta de que la lata de coca-cola, ahora sí, sin posibilidad de interpretación más optimista, está medio vacía.

– ¿En serio?

– Sí, mire, apenas queda un tercio de su contenido.

– Pues tiene usted toda la razón. Disculpe.

– De nada, entrometido personajillo. Y ahora déjeme proseguir.

El escritor enciende el enésimo cigarrillo del día (últimamente se está fumando una lumbre), y se duele de su falta de originalidad narrativa. Pero parece que todo está inventado. Por otra parte tampoco pensaba presentar este blog al II Premio Eulogio Ruipérez de narrativa posmoderna y políticamente incorrecta. Si no, se habría cagado ya en Zapatero hace un rato.

– ¿Y por qué en Zapatero?

– ¿Y por qué no? ¡Otra vez usted! ¿Es que conoce otro candidato mejor?

– ¡Hombre…! Si le añade una caricatura de Mahoma.

– No, no insista, que ésta no va para el premio. Además, estará amañado.

– Claro, el jurado es de Marbella. Dicen que hasta algún concejal…

– Como si son de Palencia, para mí todos lo mismo.

– Hombre, en Palencia somos más serios.

– Ah, ¿es usted de Palencia?

– A veces. Otros días soy congoleño. El cambio de color hace bonito, ¿sabe?

– Claro, en Palencia debe haber pocos negros.

– Algunos hay, pero son de color. Yo sólo soy negro, por eso extraña.

– Imagino. Buenas noches y dispense, que quiero seguir escribiendo.

– Faltaría más. Usted disimule. A mandar, que para eso estamos.

El escritor piensa en las ventajas de tener un negro a mano para los días en que no le apetezca escribir, como hace su vecino de blogspot Enrique Gallud Jardiel con Morongo… (de paso les recomienda visitar su espléndido blog “Humoradas”, que pueden ustedes seguir en el enlace instalado en la columna de la derecha).

Pero, quién sabe, en estos tiempos de corrección política a lo mejor está mal visto tener un negro que trabaje en lugar de uno, sobre todo si sólo es negro y no es de color. Al final el escritor sí va a tener que cagarse en Zapatero…

6 comentarios:

Anónimo dijo...

QUE BUENO!!!Chico, siempre soy casi el primero en escirbirte algo, aunque no sea nada interesante. Lo que si es interesante es el modo de divertirnos y instruirnos con ese humor tan caracteristico tuyo, y del que puedo decir orgulloso conozco bastante bien. ANIMO CON EL BLOG!Chico por Villa Calcuta hace ya muchisimo calor...ya sabes lo que eso sognifica...NICKKKK.jajajaja.Un abrazo

Anónimo dijo...

Por ciertoo...ME HE CAGADO EN ZAPATERO!!!jajajajajajajaja, ADÉUUUU

Anónimo dijo...

Espero que hayas pasado bien el día de la Bestia, el 6 del 6 del 6.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Francamente...tuyo.
Y es que, por gracia o por desgracia, y pese a tu seudónimo, muy tuyo por cierto, creo haberte identificado, porque...algo tan fino, cuidado y selecto a la par que inteligente no puede escribirlo mucha más gente. Tu también has resultado ser aguijon y caricia a la vez,jeje
Alabo desde esta pocilaga, llamada capital, tu parto y tu pluma, de la que soy y seré fiel seguidor por secular seculorum.
Y para no romper el encanto y el secreto (lógico y comprendido) y no dar pistas a trasnochados soplaorejas, firmo con un seudónimo, que espero alguien indentifique, al menos mi querido y admirado amigo "el escritor".
Un abrazo a todos
"El liendre de u"

Anónimo dijo...

No sabía muy bien como poner el nombre.
Mil perdones

Gubia dijo...

Hola, yo si soy de Palencia y tienes razón, tenemos pocos negros aqui,jaja. Un saludo y felicidades por el blog.