15 de julio de 2006

Viaje a la Serranía

Qué bien se está aquí
Esta mañana le he dicho a mi mayordomo Sigfried:

- Haz las maletas. Nos vamos.

A lo que me ha respondido con la consabida pregunta:

- ¿Mar o montaña, señor?

- Ahora montaña, en agosto ya veremos.

Que ya me he hartado de absorber rayos ultravioletas encima del tejado. Así que me voy a pasar una semana a la serranía de Cuenca, lugar que les recomiendo -entre otras virtudes- por el curioso fenómeno del frío repentino que llega apenas se esconde el sol entre las montañas.

Como aún no han descubierto el modo de conectar el ordenador a un pino, para que los lectores de La Rueca se entretengan en mi ausencia les dejo un refrescante romance fluvial de Gerardo Diego, y cuando acaben pueden curiosear por los nuevos enlaces que he dejado en la columna de la derecha.

Por cierto, como ya iba abultando la lista, he puesto por un lado los blogs en la sección "Y dicen otros..." y por otro los enlaces interesantes en "Date una vuelta...". Hay blogs muy recomendables, si es que sus autores no se han ido, como D. Enrique Gallud y yo. Algunos, como el náufrago D. Julio, y Douce, su perrita en lunas, actualizan desde la playa, una buena forma de refrescarse.

En fin, les dejo con el Romance del Júcar de Gerardo Diego:

Agua verde, verde, verde,
agua encantada del Júcar,
verde del pinar serrano
que casi te vio en la cuna

—bosques de sansebastianes
en la serranía oscura,
que por el costado herido
resinas de oro rezuman—;

verde de corpiños verdes,
ojos verdes, verdes lunas,
de las colmenas, palacios
menores de la dulzura,

y verde —rubor temprano
que te asoma a las espumas—
de soñar, soñar —tan niña—
con mediterráneas nupcias.

Álamos, y cuántos álamos
se suicidan por tu culpa,
rompiendo cristales verdes
de tu verde, verde urna.

Cuenca, toda de plata,
quiere en ti verse desnuda,
y se estira, de puntillas,
sobre sus treinta columnas.

No pienses tanto en tus bodas,
no pienses, agua del Júcar,
que de tan verde te añilas,
te amoratas y te azulas.

No te pintes ya tan pronto
colores que no son tuyas.
Tus labios sabrán a sal,
tus pechos sabrán a azúcar

cuando de tan verde, verde,
¿dónde corpiños y lunas,
pinos, álamos y torres
y sueños del alto Júcar?

8 comentarios:

Gubia dijo...

Disfruta de las vacaciones y del fresquito al atardecer, tiene buena pinta. Besos

Anónimo dijo...

Me estás dando envidia. Es imperdonable que yo no haya subido aún este verano,aunque, dm., un día de estos le pondremos remedio. Mientras tanto, si tienes ocasión, dale recuerdos a los bambys cuando bajen a beber agua al río al anochecer.
Deja a los hermanos tábanos y las hermanas culebritas en paz. Están en su hábitat. Sigue a San Francisco de Asís.
Que te lo pases bien. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Pasalo bien. Acuérdate de nosotros y trae nuevos post!

Espero que vengas morenito y nos deleites con una foto...

Anónimo dijo...

¿Qué, amigo escritor, se viene para mi tierra?
Esto es como el cielo, pero sin morirse uno. Lo cual no está nada mal, ¿verdad?. Y puedo corroborar que lo del fresquete nocturno es cierto.
Yo, que soy bastante refranero, me aplico ese que dice " de cuarenta para arriba no te mojes la barriga" y los cuarenta los he cumplido hace rato. Con lo cual por el día paso calor,porque cualquiera se mete en el río Escabas aunque lo tengo a un tiro de piedra de mi casa. El agua está gélida. Así que, como estoy de vacaciones, paso gran parte del día bajo la parra del patio esperando que llegue la noche.La lectura no me deja aburrirme y cuando trabajo no puedo dedicarle mucho tiempo.
Desde que anochece refresca mucho el ambiente. Uno se puede ir al bar dando un paseo a tomarse el café con hielo con los amigos. O caminar por la carrtera hasta el río, pero sin meterse, claro.
Lo mejor, la colcha con que tienes que cubrirte en la cama para no pasar frío. Una delicia. De verdad.

Espero que disfrutes tus vacaciones. Y a ver si puedes arreglar lo de la conexión. Te echaremos de menos.
Saludos.

Anónimo dijo...

¡ Qué vacaciones más largas te estás tomando !
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Estoy empezando a temer que tu mayordomo y tú os habéis perdido en la montaña... Espero que vuelvas pronto y nos cuentes todas tus aventuras.

Anónimo dijo...

Me gusta su nombre, pero el contenido aún más. Seguro que me perderé a menudo por aquí, si no te importa.

Un saludo.

Anónimo dijo...

uon b iyb e, sex. rin g, uze vrquko! eugi b sbd km.