3 de marzo de 2008

Escritor, camisa vieja


El lunes pasado, ZP y Maricomplejines Rajoy anduvieron por la tele tirándose los trastos a la cabeza. Parece ser que media Expaña los contempló embelesada, como si de un combate de boxeo se tratara. Y yo, que soy así de original, estuve paseando por la playa, que me parece una forma mucho mejor de gastar el tiempo.

Me han dicho que hoy, a estas horas, están con el segundo round. Mientras tanto yo acabo de pasar tan ricamente una hora de "carnaval", recordando ante el espejo las varias formas de hacer el nudo de la corbata (simple, cruzado, Windsor, medio Windsor...), sacando del fondo del armario mis camisas de cuando no vestía de luto y probando ante el espejo varias combinaciones de ambas prendas.

No, no penséis lo que no es. A pesar de lo "contento" que me tiene últimamente mi "empresa", el baile de disfraces ha sido sólo para decidir qué ropa me pongo en la obra de teatro que tengo que representar con los chavales de mi tutoría el mes que viene.

Pero en fin, me parece que al final los señores candidatos y un servidor nos hemos dedicado esta noche a lo mismo: a meternos en camisas de once varas.

4 comentarios:

maria jesus dijo...

Me parece mucho mas agradable y gratificante pasear por la playa que ver el debate. Yo fuí incapaz de verlo entero, lo ví a cachos y por acompañar a un hijo para que tuviera con quien comentar.Que te vaya bien con tus alumnos y la obra de teatro, ya contarás. Un saludo

Anónimo dijo...

El que suscribe tampoco quiso ver ninguno de esos debates. Creo que durante estos últimos cuatro años han sido suficientes para que cada tenga elementos para poder valorar lo que son y representan uno y otro de los 'pugiles' que han subido al ring estos idus de marzo.

Estos espectáculos que parecen divertir a los 'espectadores' que se sientan en las gradas del nuevo Coliseo, no sirven más que para mostrar quien es el más habilidoso,quien maneja mejor el gladius, quien esquiva mejor los golpes o sabe asestar los más bajos.

Vivimos más de 'imágenes' que de hechos. Y parece ser, como el escritor sabe: 'alea iacta est'.

Después del 'circenses', habrá que ver a cuánto sube el 'panem'. Y no parece que vayan a estar baratas las 'tortas', que nos darán o nos peguemos.

Pedro Cubero Villalba dijo...

Sí, la razón os asiste en parte. Pero si tú no te ocupas de la política, ella sí que se ocupa de ti...

Mi impresión es que elegiremos entre galgos y podencos, como aquella legendaria fábula.

Ánimo con tu obrilla, que al final se disfruta con todo lo que se sale de lo habitual.

Por cierto, celebro su vuelta al blog...

Kim Basinguer dijo...

Cada vez que leo lo de maricomplejines, me parto, y ya no resisto en decirlo.