
Después de ensayar el miércoles pasado durante cuatro horas la misma escena (una hilarante apoteosis final propia del género) tiré la toalla... por no tirar a alguno por el balcón.
Pero como ya teníamos anunciada la representación para el domingo siguiente en un pueblo al que íbamos de excursión, había que hacer algún apaño. Y el apaño fue que en tres días un grupo de voluntarios 3º y 4º de E.S.O. tuvo que aprenderse sus papeles y aguantar unos maratonianos ensayos a razón de tres horas diarias.
Eso sí, lo bordaron y a mí casi me sacan a hombros. Y es que no hay nada como trabajar con profesionales.
P.D. El nudo de la corbata bien, gracias. Finalmente nudo simple de una sola vuelta... Total, me la arrancaba del cuello en la cuarta escena ¿para qué complicarse más?