Ya me he llevado varias broncas por no actualizar La Rueca en dos meses, así que hoy vuelvo a las andadas.
Pero que conste que no estos dos meses de silencio no han sido sólo cuestión de pereza.
Lo que ocurre es que un par de días después de publicar mi último post, La Rueca llegó a las 10.000 visitas, y ante tamaño éxito la emoción me embargó.
Como en el embargo iban incluídos el ordenador, el sueldo de Sigfried, y un tupper-ware de lentejas caseras, no pude escribir y además me quedé en ayunas.
¡Imaginen el disgusto!
4 comentarios:
ya te echabamos de menos, espero que cuando llegues a las 20.000 visitas no nos hagas lo mismo.
Pensé que te habías metido en una de estas campañas electorales y andarías por ahí sacando a relucir la vida privada y milagros de tus contrincantes políticos.
Si sólo te embargan el ordenador y el tupper, pase. Lo peor es si ambicionan tu fama y todos los bienes espirituales que poseas , porque anda la cosa algo jo... robada.
Viva San Isidro del Amparo!!!
Famosa frase... de Antonio el Cantaor, Saelices (España profunda)
Pues menos mal que te embargó la emoción, que te llega a embargar Hacienda y no sabríamos más de ti.
un saludo y bienvenido otra vez
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